Apapachos para el alma

¿A quién no le gustan los apapachos? 

Al 99.999999 de los seres humanos les gustan los mimos y muestras de afecto ¿cierto? Imagínate vivir sin alimentar nuestro corazón, sería todavía más caótica la vida. Apapachar es una palabra con un poder gigantesco, apapachar es cuidar, tocar, curar y abrazar con la energía del corazón, viene de origen náhuatl que la RAE define como “palmadita cariñosa o abrazo”. “abrazar o acariciar con el alma”. Ahora ya te imaginarás el efecto que tiene en cualquier ser humano, lo importante que es abrazarnos y queremos a nosotras mismas.  

Un abrazo de 20 segundos es suficiente para que se traduzca en efectos positivos, abrazar repercute a nivel físico, psicológico y social, así que ya sabes es momento de apapacharse mucho.
Decirte a ti misma te amo, nunca será parte de una rutina, es recordarte lo valiosa y fregona que eres, y la mayoría de las veces, al convertirnos en madres, nos olvidamos de nosotras mismas por entregar apapachos a los demás, principalmente a nuestros hijos.  Nos olvidamos que necesitamos mimarnos y automotivarnos para luchar con las miles de expectativas altísimas que se nos imponen y dejamos a un lado el procurarnos, porque volcamos nuestra vida entera en esas personitas que depenen de nosotros, y es normal, pero un recordatorio siempre es bienvenido para despertar e inyectarnos de energía y amor a nuestra alma. 

Hoy quiero dejarte una pequeña nota: ámate, quiérete y apapáchate mucho, recuerda que no existen las mamás perfectas, exisitimos mamás reales que nos cansamos, jugamos, lloramos, reímos, no dormirmos, nos preocupamos, nos desesperamos, les dedicamos tiempo a nuestros hijos, salimos y lo volvemos a intentar todos los días, mostrando la mejor versión de nosotras mismas. 

Es muy importante recordar que si como mujer y mamá estás bien, si existe un autocuidado, los niños crecerán con bienestar. Lo que hoy puede preocuparte, mañana será una anécdota y lo extrañarás o verás desde otros ojos, así que hoy decide disfrutar y mirar la maternidad con amor y date cuenta que no pasa nada si un día decides no bañarlo porque el horario te rebasó, si le pusiste la tele un rato porque ya estabas agotada, si le levantaste la voz porque estabas estresada, si no llegaste a tiempo por salir tarde del trabajo,  deshazte de las culpas que cargas y apapáchate mucho, abrázate y habla contigo misma para que puedas contenterte, perdonarte y acompañarte en esta aventura de ser mamá, mujer, esposa, emprendedora, trabajadora, amiga y demás roles que asumimos. No hay duda que amamos a esas personitas que llenan de caos físico y emocional nuestras vidas, sin embargo también es válido decir “ya no puedo más”, es una prioridad darnos tiempo para tomar un baño con calma, de disfrutar un café y conectar con nuestra respiración, salir con amigas, desvelarnos y al día siguiente tu esposo o alguien cercano te apoye, comprarte esa blusa que tanto te gustó y que no lo hiciste porque se te cruzó el juguete favorito de tu hij@. Quedarte dormida junto a tu bebé en lugar de hacer la comida. 
 Es hora de soltar, aceptar los cambios de la maternidad, dejar de cuestiornos y exigirnos, ahora a reírnos, date cuenta que no estás sola ¡apapáchate! No eres la única que a veces se pueda sentir sola durante el camino de la maternidad, a pesar de estar rodeadas de amigas, familia, pareja; a veces gana ese sentimiento de no entender nada ni nadie, ni a nosotras mismas. 

Mamás, amigas, mujeres apapachémonos las unas a las otras, hagamos tribus de amor, de ayuda. Date el mismo cuidado y atención que les das a los demás, cuídate por dentro y por fuera y ten en cuenta estos recordatorios para el alma… 

  • Tus errores no te definen
  • Es de sabios preguntar y pedir ayuda 
  • Tus necesidades y sueños cuentan 
  • El respeto a tí misma es esencial 
  • Eres muy importante 

Por si hoy te sirve…  te mando un fuerte apapacho. 

«Piensa en las sonrisas de tus hijos y se iluminará tu corazón, luego enderézate la corona y sigue tu camino»
Liber- Mamá Pulpo

Deja un comentario