Como anillo al dedo la famosa frase: “Después de la tormenta llega la calma”, y sí, también en las relaciones amorosas, después de una etapa complicada puede ser el comienzo de un amor fuerte y duradero, siempre y cuando ¡claro! estemos dispuestos a ir más alla y sobre pasar la tormenta. Es esa etapa donde nos tropezamos con la misma piedra, y por eso hoy en día creo que existen tantos casos de divorcios, porque se tira la escopeta en medio de una guerra campal.
¿Cúantas veces hemos escuchado? “Parece que no era para mí» es la justificación que constantemente escuchamos cuando alguien acaba de pasar por una decepcíon amorosa, y seguramente alguna vez lo hemos dicho nosotros mismos. Sin embargo, muchas personas a tu alrededor pensaron que formaban la pareja ideal e inclusive ustedes en el momento soñaron a estar juntos forever and ever. Pero ¿por qué el supuesto amor verdadero es gradualmente desgastado a nada?
Jed Diamond, es un psicólogo, especialista en parejas, que ha llegado a la conclusión después de 40 años de investigación clínica, que la mayoría de la gente de hecho encuentra el único amor verdadero de su vida. Pero el problema es que no pueden mantenerlo unido a través de las cinco etapas del amor, la mayoría de las veces alcanzando sólo la tercera etapa.
Aquí las 5 etapas que describe:
- Enamorarse
Esta es la etapa que todos hemos experimentado, donde se vive en una nube de hormonas e ilusiones, de felicidad y satisfacción, donde nos imaginamos en el Happily Ever After. Este es el momento en que proyectamos todos los deseos y esperanzas en una pareja, la cual se convierte en la persona “ideal”, no le vemos ni un pero, cero defectos, es “LA” relación que superará todo, con la idea que la comunicación positiva será eterna. Mariposas por todos lados ¡Y es el/la elejido!
- Convirtiéndose en una pareja
En esta etapa, se inicia una relación y el amor se hace más fuerte. Hay más confianza, se conocen mucho mejor y dejamos a un lado el “qué pensará o dirá de mi” se fortalece el vínculo, una se siente protegido y deseado. Son tiempos de unión, mayor compromiso y responsabilidades con el otro, todo fluye con alegría y entusiasmo, las mariposas en el estómago van tomando un lugar. Es la etapa donde se viven los momentos más románticos, claro que con sus tintes de berrinches, algunos enojos, pero con negociaciones y sonrisas que terminaran en un TE AMO y no puedo vivir sin ti. Después de algunos años se da el paso de vivir juntos o casarse, o tener hijos si es el caso.
Y es cuando creemos que es la persona correcta y con la que queremos pasar el resto de nuestra vida.
- Desilusión
Hijole, esta etapa es la más complicada y la piedra donde todos tropezamos, la que muchas parejas no superan y se estancan. Llegan las frustraciones y se instalan pensamientos donde cuestionamos todo ¿habré tomado la mejor decisión, seremos el uno para el otro, porqué ya no es lo mismo? Se duda de los propios sentimientos y se generan ideas que nunca se desearon tener, y las perspectivas se distorcionan, así que las decepciones se vuelven constantes. Lo peros comienzas a incrementar y lo que no nos molestaba, comienza a irritarnos, a desesperarnos, aparecen las imperfecciones y la incompatibilidad. Aquí gana la idea de que no son el uno para otro, se desea un break y se decide romper o continuar la lucha…
Pero ¿Porqué muchas personas se quedan atoradas en la tercera etapa?…
- Creando amor duradero
Uffff, después de la tormenta siempre llega la calma, se logro superar la crisis y surge un amor mas puro y real, mas consciente y abierto. La estabilidad se asienta con mayor conexión.
La idealización se libera y las ilusiones que se proyectaron en las etapas anteriores se convierten en pensamientos más realistas. Se acepta, una persona real, con sus deficiencias, sus áreas de oportunidad, con sus peros y sus ishus y se sana para evolucionar. Esta etapa es muy bella y de orgullo.
- Utilizando el poder de dos para cambiar el mundo
Esta etapa es de aplausos y milagros, las parejas se funcionar como un todo, habiendo trascendido todas las etapas anteriores, que puedes decir con 100% de certeza que «esta es la persona para mí», se acepta tal y como cada uno es, se superan momentos muy difíciles, se definen acuerdos, metas, propósitos, se trabaja día a día, se apoyan, alientan a ser mejores seres humanos en todas sus esferas de la vida. No se ponen el pie, se aplauden y se empujan a ser los mejores. Es cuando te alegras por los triunfos y con respeto dices lo que piensas y sientes, cuando la admiracion es pura, cuando no hay herdidas, ni combates, si no de la mano forman un equipo fortaleciendo la salud emocional. Es un dominio de conocimiento del uno al otro, se conocen las heridas, las sombras, y se interpretan no como buenas o malas, sino como asumir que somos seres humanos que vivimos con nuestros propios monstruos que dominamos con amor.
Asi que, nos queda una reflexión, ¿Porqué muchas personas se quedan atoradas en la tercera etapa?. Porque no alimentan su relacion y su comunicación con el paso del tiempo, se da una desmotivación y un estancamiento emocional que se convierten a veces hasta en dos desconocidos. Se pierde el interés de transcender y de vincularse de otra manera, de romper monotonía, rutinas y se encierran en un ciclo sin fin ni crecimiento.
Asi que piensa, tú, ¿en qué etapa te encuentras y a cuál te gustaría llegar?
Y culquiera que sea la respuesta, sólo Recuerda, perdona, comunica.
Recuerda, ¿porqué te enamoraste de tu pareja? Todo aquello que te llevó a estar con esa persona que hoy quisás no reconoces, o que se han perdido en la aventura de la vida. Y si es posible retomen el camino, si es difícil, sólo recuédarlo con amor y respeto.
Perdona, todo aquello que ha lastimado o provocado alguna fisura en tu corazón y que a pesar de ello, han tomado la decisión de continuar como pareja. Perdona si decidiste empezar de cero o romper con lo que se tuvo, pero perdona de corazón.
Comunica, habla todo sin guardar ningún sentimiento sea cual sea, comunica con amor, firmeza, con empatía y respeto.
“El matrimonio es escribir una historia entre dos almas que son libres y verdaderas, que deciden trascender juntos.”
Liber- Mamá Pulpo.
